Obra pedagógica

En esta sección se expone, a modo de conclusión, una síntesis de aquellos aspectos o dimensiones, que son especialmente relevantes de la figura del profesor José Martel Moreno, por su trabajo y contribución al conocimiento, al desarrollo y al mantenimiento de tantas facetas de la actividad humana y que merecen ser resaltados.

Se hará una valoración de cada una de las siete dimensiones siguientes, que el profesor José Martel ha visto desarrolladas a lo largo de su vida: humanista, matemática, didáctica, profesional o de formación del profesorado, de gestión, en tecnologías informáticas e internacional.

 

José Martel humanista

 

Todos aquellos que conocimos y conocieron a José Martel han coincidido en que el profesor fue un hombre curioso, estudioso, experto e impulsor de muchísimos valores humanos y sociales. Destacó en facetas que fueron su pasión a lo largo de su vida, y que son parte inherente de la humanidad misma; así se hizo un gran entusiasta, conocedor y docto en biología y botánica, particularmente la canaria, hasta el punto de que su amplio conocimiento de las plantas medicinales, de su taxonomía y de sus características y propiedades, le llevó a tener en cuenta para sí y para quienes se lo pidieran, el uso nutricional y terapéutico de éstas. Por otro lado, su sentido ético, su conciencia y su concepción del ser humano -sin diferencias, junto al resto de la naturaleza-, le producía la admiración y el respeto más absoluto hacia todo ser vivo.

Fue también un apasionado de la lengua y la literatura española en todos los estilos, también de los idiomas en general y consiguió entender y hacerse entender en un número grande de ellos. Fue un apasionado del Arte y un amante y gran conocedor de la Historia de la Escuela Normal, de la Educación en Canarias y de la Historia canaria en general. Además, contribuyó por su interés y con su labor incansable, al mantenimiento de los archivos históricos muchos de los cuales han perdurado y estarán para siempre a disposición de la sociedad canaria. 

 

José Martel matemático

 

José Martel era licenciado en Ciencias Matemáticas por la Universidad Central de Madrid, pero además su expediente fue tan brillante que se le distinguió por ello.

Aunque era un analista y un estudioso de todo el campo de la Matemática, sintió especial predilección por la Historia de esta disciplina y sobre todo, por el área de la Geometría y era tal la capacidad de percepción espacial que poseía que conseguía visualizar al instante, casi cualquier cuerpo en el espacio, con sus características, propiedades y relaciones.

El ansia de saber, la curiosidad y la admiración por los temas antes mencionados y la capacidad de análisis y percepción con que contaba, le llevó a realizar continuos estudios e indagaciones sobre campos diversos que se plasmaron en las diferentes publicaciones y contribuciones que realizó sobre la enseñanza de la Matemática.

 

La dimensión didáctica

 

Promovió, animado y ayudado por su gran amigo Julián Caparrós, diferentes jornadas y actividades en la Escuela normal de Maestros de Las Palmas, Centro que visitaron grandes matemáticos, pedagogos y profesores de aquella época, de renombre internacional, con los que mantuvo después contacto y amistad, que impulsaron la actividad investigadora sobre la enseñanza de la Matemática, que en esos momentos en España era deficitaria, logrando que la Escuela Normal de Las Palmas alcanzara una popularidad extraordinaria a nivel social.

Sus aportaciones con recursos para la Enseñanza de las Matemáticas fueron numerosas, e impulsó y llevó a la práctica un tratamiento más manipulativo, real, directo y dinámico del proceso de enseñanza y aprendizaje de esta disciplina. Cabe destacar entre ellas, las realizadas con motivo de la exposición itinerante “Horizontes matemáticos”. También, debemos mencionar el material didáctico que elaboró durante sus 40 años de docencia, que se encuentra actualmente en el Aula-Laboratorio de Didáctica de las Matemáticas de la Facultad de Ciencias de la Educación, para el conocimiento y la utilización por parte del profesorado y los estudiantes de este Centro. Algunos de estos materiales se exponen en el Anexo sobre Ensayos y construcciones.

Asimismo, resaltamos los numerosos trabajos publicados en la prensa escrita de Las Palmas de Gran Canaria, con motivo de la celebración del año 2000 como Año Mundial de las Matemáticas, que se han recogido en el Anexo sobre Prensa.

 

La formación y la actualización del profesor de Matemáticas

 

Inmediatamente después de obtener la Licenciatura en Ciencias Matemáticas, ingresó en el terreno de la enseñanza, inicialmente de manera particular, después como profesor interino y, al poco tiempo, como profesor numerario de Institutos y de Escuelas Normales. Obtuvo también la titulación de Maestro, y a partir de ese momento dedicó cuarenta años de su vida a formar a estudiantes de Magisterio, para la capacitación teórica y conceptual pero, sobre todo didáctica, que les permitiera afrontar con éxito, el proceso de enseñanza de las Matemáticas con niños y niñas de las generaciones siguientes.

Además de la instrucción en la Titulación propia de la Universidad, impartió multitud de cursos, seminarios y talleres de formación y actualización en Didáctica de las Matemáticas, entre colectivos tales como Maestros en ejercicio o profesores de Instituto. Estos cursos los impartió en toda la comunidad canaria y consiguió difundir y dar a conocer una metodología didáctica y activa para la enseñanza de las Matemáticas, nueva y más motivadora para los enseñantes más veteranos, consiguiendo popularizar el proceso de enseñanza de esta disciplina, tan estática y ajena hasta entonces.

 

La gestión de la Escuela Universitaria del Profesorado de EGB

 

La época en la que José Martel ejerció el cargo de Director de la Escuela de Magisterio le permitió dedicarse de lleno a su “segunda casa”. Consiguió logros en aquella época que actualmente son muy reconocidos. Estos resultados ya han sido expuestos en apartados anteriores y resaltamos, por ejemplo, la recuperación de la Memoria Histórica de la Escuela, la dotación de infraestructuras como la Cafetería o la provisión de importantes fondos para la Biblioteca de Humanidades de la ULPGC, logrando que actualmente se haya convertido en una de las bibliotecas más completas de Canarias.

Pero este periodo supuso también una etapa poco grata en otros aspectos. Por un lado, coincidió su cargo con una época difícil en el inicio de la transición a la Democracia, periodo de muchos cambios y revueltas, tanto dentro como fuera de los muros del Centro, para una persona de carácter sosegado y ajeno a todo tipo de disputas, conflictos y enemistades es fácil imaginar lo difícil que pudo ser en algunos momentos el ejercicio del cargo.

Pero, por otra parte, y esto no le supondría mayor desasosiego, si tenemos en cuenta su forma de ser, sus inquietudes y sus aspiraciones, la dedicación absoluta a su Centro durante más de una década y a la enseñanza, le pudo impedir alcanzar las más altas cotas dentro de la categoría académica.

 

Las tecnologías informáticas

 

El sentido, bastante desarrollado, de la curiosidad hacia todo lo nuevo y desconocido le permitió adentrase en el mundo de las tecnologías. Hay que tener en cuenta que cuando José Martel comenzó a experimentar con recursos tecnológicos, contaría con una edad en torno a los 70 años. No deja de ser por tanto una singularidad, que una persona veterana, formada personal y profesionalmente en una etapa muy anterior al desarrollo de las tecnologías informáticas, se adapte a los nuevos tiempos de una forma tan extraordinaria como lo hizo José Martel.

Es decir, con un rango de edad en que el acercamiento a las tecnologías informáticas no resulta inicialmente demasiado motivador ni sencillo, José Martel se convirtió en poco tiempo en un gran especialista en el uso de diversos recursos didácticos en soporte informático, aunque no tanto de herramientas de oficina, pues siempre prefirió continuar con su “máquina de escribir” a la hora de redactar una carta o hacer una composición literaria. Pero, ya desde los inicios del uso de aquel Basic y Logo como recursos para la Escuela, a finales de los años 80 y principios de los 90, el profesor Martel estaba realizando sus primeras indagaciones.

Con el tiempo y la dedicación y, también a partir de la evolución vertiginosa de las tecnologías informáticas, hacia recursos más adaptados a la enseñanza y hacia entornos o interfaces más reales, el profesor Martel se convirtió en un experto en el conocimiento y el manejo de recursos como MatLab, Cabrí y Geometer, los dos últimos de Geometría dinámica. Así, impartió numerosos Seminarios y Cursos a licenciados y profesores de Instituto o incluso recibió diversas peticiones de asesoramiento, en estos programas informáticos, por parte de profesores de otras Universidades españolas.

 

La dimensión internacional

 

También con el apoyo de su gran amigo Julián Caparrós, José Martel promovió desde los primeros años de su actividad docente en la entonces, Escuela Normal de Las Palmas, el contacto y la colaboración con los más altos valores de la investigación en Educación Matemática a nivel internacional, consiguiendo que el Centro estuviera incluido en los itinerarios de eminentes profesores y matemáticos, en las celebraciones de conferencias y cursillos sobre Didáctica de la Matemática, que tenían lugar a nivel internacional, siguiendo y difundiendo las corrientes pedagógicas más actuales en la enseñanza de esta materia.

Desde el momento de su nombramiento como consejero del Canary Islands Mathematics Project (CIMP), tomó contacto con eminencias tales como la profesora Castelnuovo, Dienes, Papy, Williams, Banfi, etc., quienes visitaron la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria y la Escuela de Magisterio.

Así, este Centro consiguió una gran popularidad y renombre en aquella época, aspecto que pudo comprobarse a raíz de numerosas publicaciones en la prensa del momento. De esta manera, logró que la Escuela Normal de Maestros de Las Palmas aumentara su calidad y prestigio, convirtiéndose entonces en Centro de referencia en la Didáctica de la Matemática.

Sedes inicial y definitiva de la Facultad de Ciencias de la Educación (1953 – 2015)