Afán de conocimiento
Se conoce por Humanismo a aquella doctrina o actitud de la vida que cultiva y difunde una concepción integradora de los valores humanos, bajo la cual, aspectos como las artes, la cultura, el deporte y el saber en general, se vuelven trascendentes, y colocan al hombre, su saber y su bienestar en el centro de toda organización social.
Esta actitud de admiración hacia los valores humanos como motor de nuestro progreso en las sociedades y de nuestra evolución, está directamente relacionada con la disposición que tenemos para buscar, comprender y aprender, es decir, el deseo de conocer, que es propio de la naturaleza humana.
En el profesor Martel, el afán de conocimiento se alió con su capacidad de análisis intelectual; esta confluencia le llevó a convertirse en un indagador constante y curioso de lo desconocido y de lo nuevo y, en su ansía por conocer, a ser un gran entendido en el más amplio abanico de cuestiones de índole social, cultural, histórico o natural; pero además, en un experto en algunas de ellas.
Analizaremos a continuación algunas de las expresiones de la actividad y del conocimiento humano, por las que el profesor Martel sintió especial admiración y pasión.